viernes, 27 de abril de 2007

Entiendo al asesino de Virginia

Entiendo al asesino pero no lo justifico.

En el colegio secundario había un muchacho, muy tranquilo y mediadamente estudioso, de lentes gruesos y cabellera similar a la de Abimael Guzman apodado el "RUDO" o el "NERD". Los apodos variaban según la temporada y el chiste para la cual todos nos prestábamos era hacernos las víctimas cuando el pasara.

Es decir: si pasaba con su cara de buena gente el más matón gritaba: Rudo no me pegues! clemencia! dame una oportunidad, y entre risas y disparates tomábamos la vida como fue el Rudo jamás te iba a decir nada.

Y pues los años pasaron y 15 años después el RUDO que nunca fue RUDO ha cambiado, ahora usa lentes de contactos de color y tiene el pelo como galán de novela, reniega mucho y es capaz de meterte un puñete si te burlas de él, porque para él aun estamos en la secundaria y nuestros juegos tontos son una realidad, para el Rudo todas las bromas iban en serio y con los años ha preparado una receta de resentimiento e ira que esta a punto de estallar.

Si lo ves cuidate, para por Camaná murmurando entre dientes : "ellos no tenían razón y la tendrán que pagar" y no se refiere al a gente del colegio sino a cualquier sujeto que se le cruzo y le hizo un comentario que no le gusto.

El Rudo ahora si es el Rudo, y si tuviera un arma mataría a todos sin dudarlo, es un monstruo que se creó entre bromas y payadas de un colegio particular en el rico Rímac, donde para todos era una joda más pero para él la peor de las ofensas.

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